La RAE y el Instituto Cervantes piden evitar anglicismos

 

En el marco de los IV Premios Dircom Ramón del Corral 2021, que anunció sus ganadores en una gala conducida por la periodista Carme ChaparroMuñoz Machado y Luis García Montero, director del Instituto Cervantes analizaron la evolución y difusión del lenguaje como principal herramienta de la comunicación.

 

En este sentido, el director de la RAE ha resaltado que cada año se incorporan al Diccionario de la Lengua Española cerca de dos docenas de anglicismos, «algo que casi no se nota» en un documento que cuenta con 94.000 palabras compiladas; sin embargo, «las palabras no entran en el diccionario caprichosamente: miren el diccionario, dircoms, que es muy accesible«, ha recomendado Muñoz Machado con humor. El académico ha recordado que palabras como webinar o partner, incluso la propia dircom no están en el diccionario y «tienen su sustitutivo útil«.

 

Por su parte, el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, se ha posicionado en la misma línea al afirmar que «si podemos usar palabras de origen en español, mucho mejor, porque si hay palabras en nuestra comunidad no hacen falta incorporarlas«, para añadir que «bien está toda la creatividad que sirve para aportar cosas, pero que no rompa la gran comunidad de un idioma de 500 millones de hablantes. En el lenguaje la creatividad está muy bien y aporta cosas, pero cuidado que eso no sirva para romper lo ya construido«.   Muñoz Machado aprovechó para recordar a los directivos de la comunicación su «obligación de que el mensaje sea claro«, recordando el «papel soberano» de la sociedad en materia de idioma, reiterando que «siempre puede haber discrepancias sobre el uso de palabras que a uno se le ocurren hasta que el pueblo soberano se pronuncia».

 

El uso de las redes sociales para transmitir estos mensajes también han ocupado parte de la conversación. En este sentido, García Montero ha destacado que «el problema real que tenemos en la comunicación, a veces, es el del mal uso del lenguaje. Vamos a utilizar el lenguaje para crear vínculos de honestidad decente y vamos a intentar no usar la comunicación para despertar instintos, odios o crispación«.

 

Muñoz Machado consideró que «se escribe más y se habla menos«, pero eso no tiene por qué suponer un problema para el lenguaje; y matizó que «se escribe de manera absolutamente contraria a las reglas generales del idioma, al canon. Pero no ocurre nada, porque las redes sociales es un ámbito cerrado y no perjudica a las normas«.

 

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