Francisco Rosell, galardonado con el Premio Eisenhower

«Una prensa crítica y de investigación es la sangre de la democracia. Cuando la prensa falla, los países quedan desguarnecidos». Con esas palabras recibió el pasado martes el director de El MundoFrancisco Rosell, el premio First Amendment Award de la Asociación Española Eisenhower Fellowships por su «defensa de la libertad de expresión» y su labor como «vigía del poder».

 

Así ha sido presentado por el abogado Javier Cremades, que destacó el trabajo del periodista en su etapa al frente de la edición andaluza de El Mundo y actualmente en la edición nacional donde, según ha apuntado, se ha mantenido «independiente» y «ha pagado un precio cada día» por ello.

 

«Vivimos momentos que no son fáciles, pero hay que sacar lo mejor de nosotros para decirle al poder aquello que no quiere oír o quiere hurtar a la opinión pública porque cuando una democracia deja de serlo la primera víctima es siempre el periodista», ha afirmado Rosell, que quiso destacar «el trabajo diario» de la redacción de El Mundo «al servicio de la libertad de informar para dar el oxígeno de la libertad democrática».

 

El director de El Mundo recordó asimismo la figura de los reporteros fallecidos en conflicto Julio Fuentes y Julio Anguita Parrado y de los columnistas David Gistau y José Luis López de Lacalle citando a Baltasar Gracián -«hombre sin noticias, mundo a oscuras»- en la recogida del premio. Un galardón que también reconoció a la periodista de TVE Anna Bosch; los directores de El País y ABCJavier Moreno y Julián Quirós; el director del diario venezolano El NacionalMiguel Otero; el presentador de Informativos de Antena 3, Vicente Vallés; el fallecido columnista David Gistau; la editora de prensa en Nicaragua, Cristiana Chamorro Barrios, y la delegada de El Mundo en Andalucía, Teresa López Pavón, que recogió el premio de periodismo local.

 

López Pavón ha reivindicado «el periodismo puntilloso de la prensa de cercanía» para el que es necesario tener «valentía» porque «las presiones políticas en las cercanías es donde se dan con mayor facilidad». Y añadió: «No estamos acostumbrados en las delegaciones a recibir estos agradecimientos aunque somos la prensa que se desgañita cada día para encontrar hueco en las páginas de las ediciones nacionales». También recordó cómo hace 25 años «un grupo de periodistas que cabíamos en un taxi» junto al actual director de El Mundo, Francisco Rosell, dieron comienzo a la edición de Andalucía. «Ahí se hizo el mejor periodismo de investigación con el caso de los Ere, que supuso un cambio de paradigma», ha concluido.

 

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