La primera publicación NFT de España

Para ilustrar la portada de XLSemanal sobre el ‘tecnotalento’ patrio, la publicación cuenta con la creatividad del único español en el ‘top’ 100 de los artistas digitales. El cotizadísimo Javier Arrés ha diseñado este NFT en exclusiva. La obra alcanzó un precio, en subasta, cercano a los 26.000 dólares.

 

Javier Arrés es el único español en el top 100 de los artistas digitales. Ha llegado a lo más alto del mundo del criptoarte, donde sus dibujos y obras animadas –visual toys– han alcanzado el medio millón de dólares. En su pequeño despacho, en la quietud de la noche, diseñó durante una semana esta portada. Una ciudad virtual del futuro donde fusiona el arte español con su estilo tecnológico. Javier Arrés (Motril, Granada, 1982) no ha llegado fácilmente a este incipiente mundo del criptoarte y los NFT (non fungible token), una tecnología que posibilita al artista digital hacer un registro de la autenticidad y propiedad de su obra para poder venderla en Internet.

 

Arrés, cuyo nombre verdadero es Francisco Javier Ruiz García, utiliza el apellido de su tío abuelo que era pintor–, lleva dibujando y «buscándose la vida» desde los 11 años; llamando a la puerta de las agencias de diseño de todo el mundo hasta que empezó a recibir los primeros premios. Sus comienzos como diseñador gráfico vieron la luz en un piso de protección oficial en Madrid y hoy sus planes pasan por comprarse una casa en el «paraíso» de Fuerteventura. Ha ganado un millón de euros en el último año. Un claro reflejo de la burbuja que experimenta el arte digital, en el que Arrés asegura que «hay toneladas de basura».

 

La portada revela su fascinación por los videojuegos, un mundo que vio crecer y que se plasma en las abigarradas maquinarias que diseña en paisajes urbanos hipermodernos. «Me gustan las máquinas como a los niños, los parques de atracciones, las luces de neón de los carteles luminosos, los botones que dejo a la imaginación del espectador para que fantasee sobre su uso», afirma sobre su minuciosa obra. Al contrario de lo que puede parecer, no recurre a la inteligencia artificial. «Cojo las herramientas digitales justas para conseguir el resultado», afirma. Un trabajo extremadamente laborioso, con infinidad de detalles, que requiere de la tranquilidad que solo la noche le proporciona. «El dibujo es el 99 por ciento de mi trabajo e interrumpir el proceso es nefasto», añade. Son las cuatro o cinco de la mañana cuando apaga su ordenador. Un equipo del que no presume, pues «la clave no es tener el mejor», sino las horas de trabajo que invierte. De ahí que su estilo esté a caballo entre lo artesanal y el arte digital. Dibuja en su tableta de 100 euros con un lápiz digital y, para convertir su obra en animada –visual toy–, como la que ilustra la página web, lo hace «frame a frame», de una forma tradicional «sin recurrir a programas complejos». La obra de portada la acabará vendiendo como un NFT, como todas sus creaciones, que solamente salen al mercado en las plataformas de la Red, las llamadas ‘Marketplace’, donde compran coleccionistas que pagan en criptomonedas.

 

Javier Arrés, ganador de la Bienal de Arte de Londres 2019 y pionero del criptoarte en España, ha llegado a lo más alto del mundo en la cotización de esta nueva disciplina artística, donde sus dibujos y obras animadas –visual toys– ya han sumado un millón de euros en diferentes subastas